EL ATELIER DE ASALVO

Hoy queremos mostrarte el atelier de Asalvo, el lugar donde comienzan a tomar forma las colecciones de la marca. 

El atelier es un espacio mágico, al que todos vamos cuando necesitamos desconectar, allí se respira entusiasmo, un lugar lleno de luz, de color, de tejidos, de materiales, pero sobre todo un espacio lleno de vida, de creatividad y optimismo. 

El personal que trabaja en este departamento es joven, dinámico y muy divertido, se dedican a la creatividad, al diseño y les toca estar al tanto de las tendencias en moda y decoración para poder crear colección que gusten en todo el mundo.

En el atelier se elaboran todos y cada uno de los productos de nuestro catálogo desde los carritos de bebés, hasta las cunas. El proceso de creación se compone de cuatro fases, cada una de ellas es imprescindible. Te lo contamos: 

Fase 1: La inspiración.

Como la gran mayoría de los procesos de diseño comienzan por la investigación, observar tendencias, colores, materiales, ilustraciones… 

En esta primera parte del proceso nuestro equipo de estilistas y diseñadores necesita encontrar la inspiración, pero sin perder nunca de vista lo más importante: que buscan y que interesa a los padres de todo el mundo. 

Este punto es fundamental y jamás debemos perderlo de vista, ya que los productos que fabricamos deben adaptarse a las familias, a su ritmo de vida, a sus gustos e incluso a su estilo de decoración, ya que muchos de nuestros productos estarán durante años en sus hogares. Con todo esto claro y resonando de forma continua en nuestras cabezas, el equipo de diseño comienza a recorrer las principales ferias internacionales tanto de moda como de decoración: Première Vision en París, Preview en New York, Momad o Home London o IMM Cologne en Alemania.

Buscamos la inspiración en las marcas de moda y decoración. Que proponen las grandes casas como Dior, Louis Vuitton o Chanel y que traen los diseñadores de interiores más relevantes del mundo como Simon Brown, Britt Moram o la ecléctica Kelly Wearstler, sus propuestas, su puesta en escena, los colores, los tejidos… todo sirve para inspirar la nueva colección de Asalvo.

Fase 2: La experimentación.

Tras esta primera fase y cargados de nuevas ideas, pasamos a la fase de experimentación, donde comenzamos a probar cosas nuevas, a pensar diferente, nos retarnos para superarnos y sacar lo mejor de nosotros mismo. Estudiamos y proponemos miles de posibilidades, pero al final somos muy selectivos y nos quedamos solo con lo mejor. Buscamos como combinar los mejores tejidos, patrones, materias primas y las mejores técnicas de costura. El producto debe ser actual, pero también atemporal.

Una vez en la cabeza el producto comenzamos a darle forma, se dibuja primero a mano alzada, después digitalmente, en cada uno de estos pasos vamos dejando diseños atrás, productos que imaginábamos perfectos pero que una vez lo vemos no llegan al nivel que marcamos.

Por ultimo,  y solo con aquellos que han pasado la dura criba de los diseñadores, se comienza a trabajar en los pequeños detalles: cremalleras, costuras, remaches, etiquetas… 

Una vez vemos el producto sobre el papel totalmente terminado y nos gusta, pasamos a la tercera fase. 

Fase 3: Producir la primera muestra.

Recopilar toda la materia prima, tejidos, chasis, arneses… y comenzar a fabricar lo que comenzó como una idea y que posteriormente se trasladó a un papel, ahora tiene que cobrar vida. Cada detalle es importante, cada paso es fundamental, estilistas e ingenieros trabajan juntos en la construcción de los productos, un equipo con veinte años de experiencia sabe que hacer en cada momento para que todo termine con la calidad necesaria para complacer a los padres de todo el mundo.

El aspecto del producto terminado es importante pero donde trabajamos dejándonos la piel es en los componentes. En la calidad y funcionalidad, nuestro producto va destinado al segmento más importante de la población, los niños, por y para ellos el producto debe ser perfecto.

Fase 4: Las Pruebas de seguridad y funcionalidad.

El último paso en nuestro proceso de diseño es enviar el producto a un laboratorio internacional homologado. Ellos son los médicos de nuestro sector. La muestra se somete a distintas pruebas de calidad, resistencia y funcionalidad. ¿Son las telas resistentes? ¿Tiene elementos peligrosos para un niño? ¿Cumple su función? ¿Son los materiales duraderos? ¿Supera el tiempo de vida útil que se espera? ¿Es seguro? Estas son solo algunas de las pruebas que le realizaran al producto, si alguno de los resultados sale negativo tendremos que ponernos a realizar los cambios necesarios hasta que todo sea perfecto, es entonces cuando el producto recibe la homologación y podemos comenzar la fabricación en masa.

A partir de este momento la responsabilidad deja de estar en el taller de creación para estar en las plantas de producción. Otro día os contaremos este otro proceso productivo.

¿Os ha gustado entrar en nuestro taller? ¿Te lo imaginabas así? Déjanos tu comentarios